- Lun Nov 29, 2004 11:18
#72810
El pasado domingo se disputó esta carrera de resistencia, tal y como estaba previsto. Se trataba de un bonito recorrido de unos 10 km, nada complicado y muy divertido. Con subidas, bajadas, todo tipo de curvas y zonas de río con bastante barro y arena donde, con el paso de los participantes se hicieron varias pozas.
Un trazado muy bien elegido que gustó mucho a los participantes, lo que dice bastante en favor de los organizadores. Me hubiera gustado correr, pero mi clavícula rota me hizo verla detrás de las cintas.
El problema vino cuando la zona del río se fue complicando. Unos listillos, haciendo gala de un comportamiento antideportivo, de lo más cutre, comenzaron ha hacer trochas recortando los puntos complicados en varios lugares. Es más la primera vez que lo ví casi fuí arrollado por uno de estos cretinos. Esto te quita las ganas de correr y participar en ninguna carrera.
Me pregunto que sentido tiene esto. Evitar precisamente los puntos complicados. Esos que a los verdaderos endureros nos gustan y la razón por la que este deporte se llama enduro.
HACER TRAMPAS es desprestigiar al deporte, quedar como el culo tanto con los espectadores como con los demás competidores. Es ser un cutre que no merece ser llamado endurero. Varios de los mejores pilotos de la Comunidad de Madrid abandonaron la carrera, de poco sirve esforzarte su luego cuatro mierdas se saltan parte del recorrido y luego presuman de listos y de haberte ganado.
Situaciones como esta, demasiado habituales en los enduros deben ser erradicadas. Los que las cometen deben ser sancionados y excluidos de cualquier prueba deportiva. Aquí no vale eso de "como otros lo hacen yo no voy a ser tonto" lo que hace a quien repite esos comportamientos ser tan impresentable como ellos.
Podrían hacer en los enduros una categoría de TRAMPOSOS y encuadrarlos en ella, así todos jugarían bajo las mismas reglas.
También me parece impresentable hecharle las culpas a la organización por no poner más controles, bastante complicado resulta realizar una carrera para que encima se necesiten guardas jurados para que los capullos no hagan trampas.
Enhorabuena a la organización por sacar adelante una carrera en estos difíciles tiempos que corren.
Un trazado muy bien elegido que gustó mucho a los participantes, lo que dice bastante en favor de los organizadores. Me hubiera gustado correr, pero mi clavícula rota me hizo verla detrás de las cintas.
El problema vino cuando la zona del río se fue complicando. Unos listillos, haciendo gala de un comportamiento antideportivo, de lo más cutre, comenzaron ha hacer trochas recortando los puntos complicados en varios lugares. Es más la primera vez que lo ví casi fuí arrollado por uno de estos cretinos. Esto te quita las ganas de correr y participar en ninguna carrera.
Me pregunto que sentido tiene esto. Evitar precisamente los puntos complicados. Esos que a los verdaderos endureros nos gustan y la razón por la que este deporte se llama enduro.
HACER TRAMPAS es desprestigiar al deporte, quedar como el culo tanto con los espectadores como con los demás competidores. Es ser un cutre que no merece ser llamado endurero. Varios de los mejores pilotos de la Comunidad de Madrid abandonaron la carrera, de poco sirve esforzarte su luego cuatro mierdas se saltan parte del recorrido y luego presuman de listos y de haberte ganado.
Situaciones como esta, demasiado habituales en los enduros deben ser erradicadas. Los que las cometen deben ser sancionados y excluidos de cualquier prueba deportiva. Aquí no vale eso de "como otros lo hacen yo no voy a ser tonto" lo que hace a quien repite esos comportamientos ser tan impresentable como ellos.
Podrían hacer en los enduros una categoría de TRAMPOSOS y encuadrarlos en ella, así todos jugarían bajo las mismas reglas.
También me parece impresentable hecharle las culpas a la organización por no poner más controles, bastante complicado resulta realizar una carrera para que encima se necesiten guardas jurados para que los capullos no hagan trampas.
Enhorabuena a la organización por sacar adelante una carrera en estos difíciles tiempos que corren.