AYOUN escribió:Lopez siento decepcionarte pero esa uña nunca me a vuelto a salir bien ya se que no da para hacer las fotos de PG pero yo la tengo presente jajajaja
Ademas con quince años eso es una" lesion grave" PARA LIGAR NO? JAJAJAJA
Bien por tu NSR azul yo tambien era Garriguista aunque tenia una Rieju MR80 lo que queria era la Hurri para ir a la disco aunque mi Vespa primavera 125 azul cielo y rosa con escape y sillin blanco no estaba nada mal,haciamos unos piques en la autovia de Salou que eran la ostia incluso un amigo con un Seat 600 se apuntaba y algun dia hasta le ganabamos¡¡¡¡
Ayayayayay, Ayoun... una uña rota "lesión grave", vespa "primavera 125 azul cielo y rosa con escape y sillin blanco"... tranquilo, no pasa nada, yo soy tolerante con la opción sexual de cada uno
Bueno, la de hoy se titula
"El día alegre de mi padre"
Cuando me puse a correr el Criterium, lo hice con mi propia moto. 16 años y ver como en el garage tienes un grillo de 75, con 30c.v.... demasiada tentación, asi que montaba las luces (sin funcionar, claro), la matrícula y salía a la calle. Con buenos desarrollos la moto estaba en los 170-180 km/h, porque 30cv para lo que pesaba la moto (y yo mismo, que soy algo tirillas) eran mucho. Me encantaba pillar buenas bajadas o rectas para abrasar a las 125 que iban tan confiadas, darle algún susto a las RD350, (teníais que verles bajando marchas como locos para subir vueltas y devolverle la pasada a "ese niñato con un alambre").
Total, que en una de esas bajadas, por la cuesta de la perdices en la N-VI, con un amigo de paquete, vislumbro una NSR125 con el tío que baja plegado a todo lo que daba. Bajada de marchas, vueltas arriba y... ¡¡a la caza!!. El paquete y yo plegados, me voy acercando a la 125, casi la tengo, te vas a cagar.. y de repente "PPPPOOORROOOPOOOOROOOOOPRORORORORORORORO"... el sonido del escape que se vuelve de "megáfono". Mirada para atrás... coño.. ¿dónde esta el silencioso?. ¡Joder!... lo he perdido. Me paro a la derecha, al arcen, cagandome en todo y justo detrás mio se para un coche. Yo mirando mi tubo y a ver si veía el escape por la carretera... y veo que el tío del coche no baja. Ya me mosqueo, me fijo un poco más y veo que en el cristal delantero, a un palmo de la cabeza del piloto (a su derecha) tiene un agujero del tamaño de una manzana.
Empiezo a atar cabos.. ostia, no puede ser, no puede ser. Efectivamente, mi silencioso había salido como un proyectil y había atravesado su cristal. Os juro que estaba a un palmo de su cabeza. Además, me fijo y veo que le ha atravesado también el cristal trasero, limpiamente. Me echo las manos a la cabeza, completamente acojonado, y voy para la ventanilla del conductor. Este sigue sentado, sin hacer nada, sin moverse. Le pregunto "Dios mio, lo siento, lo siento, ¿está usted bien?", el tío está pálido, sin hablar. De repente, abre la puerta y empieza a vomitar temblando. ¡Joder que susto se había llevado!. ¡¡Lo debió ver muy, muy cerca!!!.
Yo acojonado, la moto sin seguro, yo sin carnet, sin silencioso... y claro... lo que tenía que pasar. Llegan dos de la GC en las BMW. Preguntan que ha pasado, se lo contamos, afortunadamente el tío ya se había recuperado del susto. Uno de los GC no quitaba ojo a mi moto. Yo temblaba más que el tío del coche. Y por fin, la frasecita de rigor "bueno, pues hagan ustedes el parte". Yo dije que si y me puse a buscar en mi mochila del cole, haciendo como que buscaba los papeles, esperando que la GC se fuera al ver que no pasaba nada, pero el GC no le quitaba el ojo de encima a la moto. Yo disimulando, haciendo que sacaba documentos y por fin, el que mira tanto mi moto dice "¿Dónde están sus cascos?".
¡Plof!. Os podéis imaginar lo que sigue... "documentación, por favor". "Mire usted, es que yo he salido un momentito". Total que sacaron el libro de recetas y este fue el diálogo:
- Carnet de conducir.
- No lo tengo aqui.- Ni alli, no tenía.
- Permiso de circulación.
- No lo tengo aquí.
- Seguro en regla.
- No lo tengo aquí.- Tampoco allí.
- D.N.I.
- Pues tampoco
En ese momento el GC se frotó entre los ojos, como si le doliera la cabeza, viendo la que se venía encima.
- Dígame su nombre, dni y dirección
- XXX, YYY, ZZZZ.
- Repita su dni
- YYY
- Repita su dirección
- ZZZZ
- Repita el dni
- PPP
- ¡¡¡Me ha dado usted uno distinto!!!
- Perdone, perdone, es que estoy nervioso...
- Vamos a ver, ¿lleva usted algo encima que confirme su identidad?. En caso contrario, inmovilizaré el vehículo y tendrá que venir a comisaría.
Yo ya estaba acojonadito. Me pongo a mirar en la mochila... y veo las notas, que las llevaba escondidas por los cates que me habían caído. Se las doy al agente. Se vuelve a frotar los ojos como diciendo "esto no me puede pasar a mi".
- Bueno, el nombre coincide. Por cierto, estará tu padre contento con todas las que has suspendido y la que le va a caer... un momentito que voy a comprobar sus datos.
El caso es que yo veía a mi amigo, el que venía de paquete, que empezaba a escojonarse. "Joder tío, encima te va a echar la bronca por las notas". Ahi ya me subio mi pavo de adolescente "es verdad...¿por que coño tiene que decirme nada de mi padre y las notas"... gilipollas que soy... ya cambié mi actitud y me puse chulito, viendo como, una tras otra, caían hojitas de multa:
- Sin casco, ni usted ni acompañante, 30000 ptas.
- La va a pagar rita.
- Sin permiso de circulación de la motocicleta, le voy a poner lo máximo, 50000 ptas.
- La va pagar la priam de rita
- Sin carnet de conducir, le voy a poner lo máximo, 250000 ptas, por poner en peligro la vida de otro conductor.
- Romperé la hucha.
- Sin seguro obligatorio, le voy a poner lo máximo, 250000 ptas, por poner en peligro la vida de otro conductor.
- Pediré la paga a mi abuela
- Y no quiero ponerme a mirar la moto, porque ese tubo de escape no es legal...
- Ehhh.. me callo.
Viendo las cifras que me pasban por delante esta vez el que tenía ganas de vomitar era yo, aunque me hacía el machito delante de mi amigo. ¡¡¡Más de medio kilo!!!... jodeeeeeer, cuando lo viera mi padreeeeeee.
- Y ahora, coge usted la moto, y se va empujando hasta casa, como le vea montado en ella, van directos a comandancia.
De nuevo se me subió el pavo y ya totalmente mosqueado le digo:
- Agente, ¿le puedo pedir una cosa?
- ¿Qué?
- Pues, que ya que estamos, si me puede firmar las notas, asi por lo menos es un disgusto menos que le doy a mi padre.
Me cayeron otras 25000 por desacato.
Afortunadamente, esto es España, y no me llegó ni una sola de las multas...