- Mié Sep 27, 2006 20:27
#176526
POLÉMICA TRAS EL SINIESTRO QUE ARRASÓ 300 HECTÁREAS
Los bomberos tardaron 45 minutos más en llegar al fuego al no poder usar la pista forestal
El camino que iba directamente al incendio está intransitable por falta de mantenimiento de la conselleria
Los camiones de extinción que acudieron al incendio intencionado que los pasados días 14 y 15 arrasó la Serra del Mirant y Gallinera tuvieron que dar un rodeo de 18,3 kilómetros porque la pista forestal de Benirrama que conducía directamente al lugar donde se originó el fuego está prácticamente intransitable. Los vehículos de extinción emplearon entre 45 y 50 minutos en el recorrido alternativo que les llevó al incendio.
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A. P. F., La Vall de Gallinera
El incendio que calcinó más de 300 hectáreas en la Vall de Gallinera, l'Atzúvia (la Marina Alta) y Villalonga (la Safor) fue un cúmulo de dificultades. El fuego comenzó cuando ya había caído la noche y los camiones de extinción tuvieron que dar un considerable rodeo para llegar al lugar donde se originaron las llamas.
Y todo porque la pista forestal que parte de Benirrama y sube a la Serra del Mirant (o Almirall) y que era el camino más corto para llegar al incendio está muy deteriorado y es prácticamente intransitable. Por esta pista forestal los bomberos hubieran llegado desde Benirrama en apenas 15 minutos al foco donde se inició el fuego.
Los vehículos ligeros del parque de bomberos de la Marina Alta sí que utilizaron este camino forestal, que tiene una fuerte pendiente, está muy erosionado y en algunos tramos es un auténtico pedregal. Sin embargo, los camiones de extinción tuvieron que efectuar un recorrido alternativo de 18,3 kilómetros y, desde Benirrama, tardaron en llegar al incendio entre 45 y 50 minutos.
El rodeo que se vieron obligados a dar les llevó por la CV-700 hasta Benialí, la Carroja y Alpatró, donde se desviaron a Llombai; allí subieron por un camino asfaltado y luego continuaron por otra pista forestal que cruza de Oeste a Este la Serra del Mirant. Este camino también presenta tramos muy deteriorados, pero al ser más llano los camiones pudieron alcanzar el lugar donde el fuego ya se propagaba con rapidez.
A la dificultad de transitar por pistas forestales en las que la Conselleria de Territorio no ha efectuado ningún tipo de mantenimiento, se añade que los vehículos de bomberos tuvieron que acceder a la zona ya de noche. Llegar hasta el incendio fue por tanto toda una odisea. Y sólo los medios terrestres pudieron combatir las llamas, ya que hasta el amanecer no intervinieron medios aéreos.
La pista forestal de Benirrama tiene unos tres kilómetros. Comienza con un tramo de piedras sueltas y fuerte deterioro. Luego se llega a otro tramo que está hormigonado, pero hay que superar un escalón considerable. Además, esta parte hormigonada se acaba a los pocos metros. A continuación, sigue otro tramo otra vez de gran pendiente, de piedras sueltas y totalmente irregular.
La falta de mantenimiento queda patente en los tramos en los que el camino se asemeja más a un pedregal que a una pista forestal. Las fuentes consultadas por este diario precisaron que este camino, como también ocurre con otros muchos del interior de la Marina Alta, está «machacado» porque a menudo circulan por aquí quads y todoterrenos de gran cilindrada. Luego las lluvias terminan de erosionar la pista forestal.
Esta pista de Benirrama enlaza con otra que baja hasta el término municipal de Villalonga (la Safor) y con la que lleva hasta Llombai, que fue la que utilizaron los camiones de extinción para llegar al incendio que hace unos días arrasó más de 300 hectáreas.
El fuego afectó a tres términos municipales, el de l'Atzúvia, donde ardió el 51% de la superficie arrasada por las llamas, la Vall de Gallinera (el 48,9%) y Villalonga (0,1%). Desde el primer momento, cobró fuerza la hipótesis, luego confirmada, de que el incendio fue intencionado.
Los bomberos tardaron 45 minutos más en llegar al fuego al no poder usar la pista forestal
El camino que iba directamente al incendio está intransitable por falta de mantenimiento de la conselleria
Los camiones de extinción que acudieron al incendio intencionado que los pasados días 14 y 15 arrasó la Serra del Mirant y Gallinera tuvieron que dar un rodeo de 18,3 kilómetros porque la pista forestal de Benirrama que conducía directamente al lugar donde se originó el fuego está prácticamente intransitable. Los vehículos de extinción emplearon entre 45 y 50 minutos en el recorrido alternativo que les llevó al incendio.
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A. P. F., La Vall de Gallinera
El incendio que calcinó más de 300 hectáreas en la Vall de Gallinera, l'Atzúvia (la Marina Alta) y Villalonga (la Safor) fue un cúmulo de dificultades. El fuego comenzó cuando ya había caído la noche y los camiones de extinción tuvieron que dar un considerable rodeo para llegar al lugar donde se originaron las llamas.
Y todo porque la pista forestal que parte de Benirrama y sube a la Serra del Mirant (o Almirall) y que era el camino más corto para llegar al incendio está muy deteriorado y es prácticamente intransitable. Por esta pista forestal los bomberos hubieran llegado desde Benirrama en apenas 15 minutos al foco donde se inició el fuego.
Los vehículos ligeros del parque de bomberos de la Marina Alta sí que utilizaron este camino forestal, que tiene una fuerte pendiente, está muy erosionado y en algunos tramos es un auténtico pedregal. Sin embargo, los camiones de extinción tuvieron que efectuar un recorrido alternativo de 18,3 kilómetros y, desde Benirrama, tardaron en llegar al incendio entre 45 y 50 minutos.
El rodeo que se vieron obligados a dar les llevó por la CV-700 hasta Benialí, la Carroja y Alpatró, donde se desviaron a Llombai; allí subieron por un camino asfaltado y luego continuaron por otra pista forestal que cruza de Oeste a Este la Serra del Mirant. Este camino también presenta tramos muy deteriorados, pero al ser más llano los camiones pudieron alcanzar el lugar donde el fuego ya se propagaba con rapidez.
A la dificultad de transitar por pistas forestales en las que la Conselleria de Territorio no ha efectuado ningún tipo de mantenimiento, se añade que los vehículos de bomberos tuvieron que acceder a la zona ya de noche. Llegar hasta el incendio fue por tanto toda una odisea. Y sólo los medios terrestres pudieron combatir las llamas, ya que hasta el amanecer no intervinieron medios aéreos.
La pista forestal de Benirrama tiene unos tres kilómetros. Comienza con un tramo de piedras sueltas y fuerte deterioro. Luego se llega a otro tramo que está hormigonado, pero hay que superar un escalón considerable. Además, esta parte hormigonada se acaba a los pocos metros. A continuación, sigue otro tramo otra vez de gran pendiente, de piedras sueltas y totalmente irregular.
La falta de mantenimiento queda patente en los tramos en los que el camino se asemeja más a un pedregal que a una pista forestal. Las fuentes consultadas por este diario precisaron que este camino, como también ocurre con otros muchos del interior de la Marina Alta, está «machacado» porque a menudo circulan por aquí quads y todoterrenos de gran cilindrada. Luego las lluvias terminan de erosionar la pista forestal.
Esta pista de Benirrama enlaza con otra que baja hasta el término municipal de Villalonga (la Safor) y con la que lleva hasta Llombai, que fue la que utilizaron los camiones de extinción para llegar al incendio que hace unos días arrasó más de 300 hectáreas.
El fuego afectó a tres términos municipales, el de l'Atzúvia, donde ardió el 51% de la superficie arrasada por las llamas, la Vall de Gallinera (el 48,9%) y Villalonga (0,1%). Desde el primer momento, cobró fuerza la hipótesis, luego confirmada, de que el incendio fue intencionado.
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