- Vie Feb 23, 2007 19:56
#201084
... o mejor dicho, para los guardias civiles que esta tarde me pararon.
Cerca de Cáceres, había salido yo sólo en plan tranquilo por una zona conocida, disfrutando del barro y las trialeras, controlando en todo momento, pero fuera de camino. A la vuelta para casa, en un cruce de caminos me encuentro con un Nissan terrano que me da el alto.
Me saludan muy educadamente y me piden la documentación, uno de ellos revisa mi moto y el otro se pone a hablar conmigo, me cuenta que por la zona hay muchas motos de cross que van a saco, sin matrícula, sin respetar nada y que por eso tienen que parar a todo el que se encuentren. Me dicen que llevan toda la tarde escuchándome en la trialera en la que me había metido y sabían que a la vuelta pasaría por donde estaban ellos.
De repente comienza a llover, empieza a caer agua sin control y me dicen que puedo continuar, que todo estaba correcto, pero que si quiero puedo subir con ellos en el Nissan hasta que deje de llover. Como ya me habían dicho que estaba todo correcto, pues no me lo pienso y me meto con ellos en el coche.
Quince minutos hablando con la benemérita, una experiencia única. Como he dicho antes, un DIEZ para esta pareja en concreto.
Cerca de Cáceres, había salido yo sólo en plan tranquilo por una zona conocida, disfrutando del barro y las trialeras, controlando en todo momento, pero fuera de camino. A la vuelta para casa, en un cruce de caminos me encuentro con un Nissan terrano que me da el alto.
Me saludan muy educadamente y me piden la documentación, uno de ellos revisa mi moto y el otro se pone a hablar conmigo, me cuenta que por la zona hay muchas motos de cross que van a saco, sin matrícula, sin respetar nada y que por eso tienen que parar a todo el que se encuentren. Me dicen que llevan toda la tarde escuchándome en la trialera en la que me había metido y sabían que a la vuelta pasaría por donde estaban ellos.
De repente comienza a llover, empieza a caer agua sin control y me dicen que puedo continuar, que todo estaba correcto, pero que si quiero puedo subir con ellos en el Nissan hasta que deje de llover. Como ya me habían dicho que estaba todo correcto, pues no me lo pienso y me meto con ellos en el coche.
Quince minutos hablando con la benemérita, una experiencia única. Como he dicho antes, un DIEZ para esta pareja en concreto.